En una sesión marcada por intensos debates políticos, la Cámara de Diputados de Argentina aprobó con una media sanción el proyecto de Ley “Bases y Principios para la Libertad de los Argentinos”, que incluye la privatización de Trenes Argentinos.
Se trata de la orden del día 7, título 2, capítulo 2, artículos 7 al 23 que fuera tratado el 30 de abril de 2024 en el recinto de la Cámara de Diputados.
Votación de la privatización en Diputados
La votación concluyó con 138 votos a favor, 111 en contra y 2 abstenciones, evidenciando la división entre los bloques políticos respecto a este cambio significativo en la política de transporte del país.
El respaldo al proyecto provino principalmente de los diputados de la Libertad Avanza, el PRO, y la mayoría del radicalismo, además de otros bloques menores y algunos independientes. A pesar del amplio apoyo, la oposición, liderada por Unión por la Patria y otros grupos de izquierda, se mostró firmemente en contra.
Descargar acta de la votación del capítulo privatizaciones
Se puede acceder al acta completa de la votación en la web oficial de la Cámara de Diputados. Click aquí para ver el acta en PDF.
Proyecto de privatización de Trenes Argentinos
Este proyecto es parte de una serie de reformas propuestas por el gobierno actual, que busca modernizar y mejorar la eficiencia de los servicios públicos a través de la inversión privada. Además de la privatización de las empresas estatales, la ley incluye reformas en el sistema de importaciones y en la estructura fiscal del Estado.
La aprobación en Diputados es solo el primer paso para que el proyecto se convierta en ley. El próximo martes se discutirán los artículos de la ley en detalle en la Cámara, antes de pasar al Senado, donde se espera que el debate continúe con la misma intensidad. El resultado de estas discusiones será crucial para el futuro del transporte público en Argentina y para la política económica del país en general.
Este es un momento histórico para Argentina, ya que estas reformas podrían representar los cambios más significativos en la política económica y de transporte desde las realizadas en la década de 1990 bajo la presidencia de Carlos Menem. El gobierno actual, con este proyecto, espera iniciar un proceso de transformaciones que promueva una mayor eficiencia en los servicios estatales y una economía más dinámica y competitiva.